Una escapada al hotel Stedsans in the woods
El resort Stedsans in the Woods es un resort y un restaurante con la sostenibilidad y la ecología como banderas. Situado en el suroeste de Suecia, permite sumergirse de lleno en el bosque.
"Para cambiar algo, construye un nuevo modelo que haga obsoleto el modelo existente". Esa máxima de Buckminster Fuller, arquitecto, inventor y uno de los primeros activistas medioambientales, sirve de inspiración en Stedsans in the Woods. La forma fácil de definir este lugar en los bosques del suroeste de Suecia sería decir que es un resort con un restaurante ecológico. Pero, en realidad, es mucho más: una experiencia de autenticidad verde para los visitantes, y un proyecto de estilo de vida simple y sostenible llevado a cabo por una pareja de chefs daneses.
Mette Helbæk, escritora gastronómica y cocinera, conocida como “la reina de las verduras”, y su esposo, Flemming Hansen, chef del Stedsans at ØsterGRO, en Copenhague, tenían un sueño que hicieron realidad en el verano de 2107: junto con sus hijas, recogieron sus bártulos, dejaron atrás su estresante ritmo laboral y crearon un lugar muy especial en Hyltebruk, junto a un lago, a medio camino entre Gotemburgo y Copenhague. Es su casa, pero también un nuevo concepto de resort-restaurante, donde la comida sana y exquisita puede degustarse a tempo lento inmersos en la Naturaleza. Un lugar para relajarse y nutrir el alma, donde no hay electricidad ni agua caliente y todo lo que se come proviene del huerto propio, cultivado con criterios de la permacultura, o de granjas cercanas.
Los huéspedes llegan el viernes o el sábado por la tarde y pueden tomar una copa o un refrigerio en el embarcadero, bañarse en el lago, remar en canoa o tomar una sauna. Y, más tarde, cenar en largas mesas compartidas en medio del bosque. No hay prisa, no tienen que volver en sus coches porque una cabaña o una tienda beduina les espera para dormir bajo las estrellas. También hay una zona de acampada free. En este lugar tan libre, todos los elementos decorativos son reciclados, comprados en mercadillos suecos, incluso la vajilla del restaurante. La dueña es una apasionada del wabi sabi, la filosofía japonesa que reclama la belleza de lo imperfecto, lo humilde y lo natural. El lujo aquí es poder disfrutar de la comida en buena compañía y en un lugar que nos reconecta con la madre Naturaleza.