Las cenizas del volcán de La Palma llegan al Botánico de Madrid en forma de jardín zen
El arquitecto y paisajista Hiroya Tanaka rinde tributo con esta instalación efímera construida con las cenizas del volcán de Cumbre Vieja de La Palma a los afectados por la erupción, mientras reflexiona sobre las consecuencias del cambio climático.
Hiroya Tanaka trabajando en el jardín zen negro del BotánicoFoto: Real Jardín Botánico
El Jardín Botánico de Madrid ha sido el receptor de setenta toneladas de cenizas del volcán Cumbre Vieja que durante 85 días estuvo activo en la Palma. ¿El motivo? Poder conformar "Un jardín zen negro" con ellas, una instalación creada por el paisajista y arquitecto japonés Hiroya Tanaka y comisariada por la directora de Cultura y Exposiciones de Casa Asia, Menene Gras Balaguer. La obra, ubicada en la terraza de la Flor junto al Palacio Villanueva, sirve como oposición al recorrido natural del Jardín Botánico, organizado para que el público se pasee entre sus plantas y lea las explicaciones con carácter científico. Por su parte, un jardín zen llama a detenerse y contemplar.
De esta manera el artista ha cubierto la superficie del jardín seco con las cenizas producidas por la lava del volcán, que más allá del impacto visual de sustituir la tradicional gravilla blanca por el color negro, sirve también como homenaje a los afectados por este desastre natural. Para complementar el jardín y su significado de tributo, Tanaka ha colocado una constelación de siete piedras de gran tamaño que representan el archipiélago canario: La Palma, El Hierro, La Gomera, Tenerife, Gran Canarias, Lanzarote y Fuerteventura, convirtiendo la superficie de la arena en el mar que las rodea y las olas que llegan a la orilla.
Aunque no es muy común, para Hiroya Tanaka la idea de un jardín negro no resulta del todo extraña ya que Japón se encuentra en el Cinturón de fuego del Pacífico y los movimientos sísmicos y actividad volcánica son fenómenos frecuentes en el país. Hasta diciembre estará abierto al público este peculiar jardín zen que busca invitar a los visitantes a reflexionar acerca del impacto de las catástrofes naturales como consecuencia derivada del cambio climático.
Obra del artista Lee Nam Lee
Foto: Lee Nam Lee
La visita a esta instalación, además, brinda la oportunidad de descubrir otra exposición en colaboración con Casa Asia que alberga hasta septiembre el Botánico entre el invernadero de los bonsáis y el Patio del Tilo. "La risa de las flores" parte de un verso del poeta japonés Matsuo Bashô y sus haikus de primavera. Quince artistas contemporáneos de España, Japón, Corea, Irán y Filipinas han estudiado la relación humana con la naturaleza y cómo una sociedad puede crear su identidad cultural a través de las flores. Los pintores, fotógrafos y artistas audiovisuales participantes han creado o intervenido obras incluyendo una presencia floral como protagonista de las mismas.