¡Estos bañadores duran diez veces más que los convencionales!

La perfección existe. Demadly arrancó en 2016 en Estocolmo de la mano de la emprendedora Madeleine Forssell que, desanimada por no encontrar una marca de baño que cumpliera con sus expectativas, decidió crear la suya.

Sin embargo, no es otra propuesta al uso. "Empowering Swimwear" es lo que promete su slogan. Y no en vano. Demadly propone favorecedores bikinis y bañadores que esculpen y resaltan la silueta femenina, así como pone especial atención en la calidad de su tejido. Porque la obsesión de la fundadora se centra en que sus prendas duren temporada tras temporada, y no se vean castigadas por el salitre, cloro o cremas solares. Así pues, produce a pequeña escala y de forma ética y sostenible en Italia.

Entonces, nosotros nos preguntamos: ¿Dura realmente diez veces más que los bañadores convencionales? Sí, el tejido se prueba durante 3000 horas (120 días) en un entorno SPA sin que las fibras se rompan. También proporciona una alta protección UV (SPF 50+) debido a las cualidades técnicas de las fibras textiles.

Todo sin descuidar la estética, y es que sus productos dejan intuir la estética nórdica de su lugar de origen, haciendo un guiño especial a los Samis una tribu indígena del norte de Suecia. A través de detalles como trenzas, borlas o símbolos chamánicos, la marca evoca un pasado en comunión con la naturaleza.

Pero, como decíamos, por encima de todo, Demadly busca empoderar al público femenino. Como su creadora explica: “El bikini es probablemente la prenda en la que te sientes más expuesta en público. Si te paras a pensar, puedes llegar a sentirte muy vulnerable al estar a penas vestida alrededor de desconocidos.” Demadly persigue a través de sus bikinis promover que la mujer que se sienta segura, cómoda y bella en su propia piel.