Arflex, entre la explosión de color y el infinito

Un sofá es una pieza imprescindible en la decoración de cualquier salón, de forma que el diseño del mismo supone una apuesta en la que no todos los estudios salen victoriosos. Asumiendo riesgos, Claesson Koivisto Rune se han decidido por el color en una propuesta que presentarán en el Salón de Milán 2018.

El trio de diseñadores juega la carta de la experiencia ampliando el catálogo de Arflex con un sofá y una mesilla de centro que de seguro todos querríamos para nuestro salón. Tokio es el nombre que han escogido para el sofá, de generosas proporciones, pero con unos volúmenes definidos a partir de esquinas redondeadas que permiten jugar con múltiples combinaciones. De esta forma, Tokio se transforma en un sofá rectangular perfecto para ir a pared, o bien en un conjunto de asientos cuadrados que quedarían perfectos como pieza central de una estancia. El ingenio técnico está presente en el diseño del sofá, ya que las patas se han desplazado hacia el interior del módulo, dando la sensación de que flota sobre el suelo.

El otro indispensable de cualquier salón es la mesilla auxiliar, así que Claesson Koivisto Rune no han querido dejar coja esta estancia y para ello han creado Infinity. Inspirada en el símbolo infinitoque representa el concepto matemático y que queda plasmado el diseño de las patas, un conjunto de tubos metálicos que se extienden en diagonal para cubrir completamente los puntos de suspensión del sobre de la mesa, y que dependiendo del punto de la habitación en el que estemos parece transformarse en un mueble completamente diferente.

Ambos diseños se presentan en varios acabados, satisfaciendo de esta forma al consumidor más conservador que prefiere colores sobrios como ocres y negros, y a aquellos que viven por el color con una propuesta colorista. La experiencia es importante, y Claesson Koivisto Rune cuentan con un curriculum impresionante.