Así suena Nendo
El estudio de Oki Sato crea un altavoz que combina la artesanía en madera con un diseño tan delicado como sorprendente
Altavoz Bunaco, de Nendo.
Una fina tira de madera de haya encapsulada en un cilindro transparente transporta una frecuencia a lo largo de una espiral hacia el altavoz…, o eso parece. La magia de Nendo radica en jugar con la simpleza de un mecanismo conocido, añadiendo un componente sorpresa. El reto del estudio del diseñador Oki Sato es precisamente ese: aportar un signo de exclamación, una vuelta de tuerca, una tilde, a la vida doméstica, a través de diseños prácticos, innovadores y divertidos. No es la madera de haya lo que conduce el sonido hacia el altavoz, pero la gracia y destreza del diseño hace surgir la duda en el espectador (o el oyente, en este caso). Nendo no pretende engañar sino, simplemente, sacar una sonrisa.
Altavoz Bunaco, de Nendo.
En esta colaboración con la firma Bunaco, con sede en Aomori (Japón), Nendo crea un delicado pero impactante altavoz, que envuelve la tecnología de un artilugio inalámbrico en la inocencia de la madera. La empresa Bunaco, fundada a finales de los años cincuenta, emplea la madera de haya de los bosques de su región en todos sus diseños, creando objetos domésticos honestos y sostenibles.
Altavoz Bunaco, de Nendo.
Ambas empresas imprimen su sello en este proyecto, latente tanto en el trabajo de ebanistería como en el ingenio del diseño. La pieza del altavoz queda envuelta en una finísima tira de madera de haya de 1 mm de grosor, que desciende en espiral y oculta el cable de alimentación. Ambos elementos se encierran en una urna de metacrilato, que permite apreciar la artesanía detrás del diseño. Las formas de las cavidades internas, así como las propiedades de absorción acústica de la madera, hacen que el altavoz emita un sonido excepcionalmente claro y suave.
Altavoz Bunaco, de Nendo.
Hace ya 16 años que Oki Sato emprendió la aventura de Nendo con una única intención: “buscar los instantes mágicos de la rutina diaria”. Hoy el estudio continúa siendo un referente de libertad, calidad y creatividad en el diseño. Sus piezas desfilan por importantes instituciones, como el MoMA de Nueva York o el Victoria and Albert Museum de Londres, y entre sus clientes destacan nombres tan conocidos como la marca de zapatos Camper o las firmas de cosméticos Sisheido.