El feng shui es la ciencia china milenaria que enseña a vivir en armonía con el entorno y a manejar la energía para ser felices. El entorno en el que se vive influye y modifica la percepción de la vida. En otras palabras, la casa es el reflejo de cada cual y permite ver el trabajo introspectivo a realizar. Se trata pues de un modo terapéutico para mejorar al alcance de todos: modificar fuera para cambiar por dentro. Amparo Galán, interiorista emocional y experta en feng shui, nos enseña cómo adaptarlo a la casa este verano.
"El feng shui externo actúa desde fuera para armonizar el feng shui interno, el más importante. Reconocer nuestra esencia nos ayuda a afinar nuestras capacidades a nivel físico, emocional y mental. Estamos en búsqueda de nuestra felicidad siempre desde nuestro centro, si cogemos otro camino que no es el nuestro nunca podremos ser felices" resume Amparo.