Josef Albers (1888-1976) decía que uno de los objetivos en el arte y en la vida era conseguir el "máximo efecto a través del mínimo de medios". Con su uso casi espiritual del color, el pintor alemán apostaba por el uso de la economía en la forma en sus lienzos, sencillos y abstractos, que se basaban en complejos conceptos relacionados con la percepción del color y las formas de entender el arte. Sus cuadrados entrelazados, en los que tanto profundizó, juegan con la geometría y hoy se materializan en diversas piezas de mobiliario que se cuelan en tu casa.