Este refugio ecológico en medio del bosque es perfecto para desconectar
Esta casa en Sant Cugat de Dom Arquitectura ha sido proyectada para vivir en permanente contacto con la Naturaleza
Situada en la ladera de la montaña, esta casa proyectada por Dom Arquitectura es la morada ideal para quien desea vivir en contacto permanente con la naturaleza. Por ello, en su construcción los criterios sostenibles han sido decisivos. En primer lugar el impacto ambiental. La vivienda aprovecha como base los pilotes de hormigón y la estructura horizontal de una edificación anterior y la madera empleada en su edificación procede de plantaciones cercanas de pino rojo del Pirineo, reduciendo así el uso de medios de transporte.
El proceso de construcción se ha basado en la arquitectura prefabricada. Solo el montaje se ha realizado sobre el terreno, evitando alterar el entorno en la medida de lo posible. La madera es el único material que puede reducir las emisiones de CO2, llegando a ser casi nulo al finalizar la construcción. Aquí procede en su totalidad de bosques con certificado de gestión sostenible y, además, es un material reutilizable y reciclable.
Otra ventaja de la madera que se ha tenido en cuenta es su propiedad como aislante térmico, ya que evita la pérdida de calor en invierno y protege de las altas temperaturas en verano. La fachada sur cuenta con mayores aberturas al exterior para captar eficientemente la radiación solar en los meses fríos, quedando más protegida del sol directo en los meses cálidos. En las demás fachadas las ventanas son más pequeñas para favorecer el control térmico de la casa y la ventilación cruzada.
En la cubierta se ha colocado una placa solar para proporcionar agua caliente al baño y bajo la casa se alojan siete depósitos de recuperación del agua de la lluvia. La vivienda dispone asimismo de un huerto ecológico que proporciona gran autonomía alimentaria a sus residentes, además de una pequeña construcción adyacente con colmena para la obtención de miel.