En el casco histórico de la ciudad de Praga, en un señorial edificio residencial de la década de 1920, el estudio Lenka Míková architekti ha creado una vivienda funcional, en la que reina el espíritu minimalista. "La arquitectura del edificio sugería un cambio estilístico del Art Decó al funcionalismo temprano, que se convirtió en la inspiración para nuestro concepto interior", tal como apuntan los ejecutores del proyecto. Materiales atemporales, detalles refinados y muebles a medida marcan las pautas estilísticas. "El objetivo era proporcionar una vida contemporánea sin pretensiones, casi minimalista, con una apuesta por la simplicidad al tiempo que se ofrece una diversidad de atmósferas y experiencias", sentencian los arquitectos.