El director de cine Marc Forster vende una casa histórica de Richard Neutra

Marc Forster se mudó desde Suiza a Nueva York en la década de los 90 y allí empezó su carrera como director y guionista, rodando varios documentales. En 1995 se fue a Hollywood para quedarse y triunfar. Algunas de sus películas más famosas son Monster's Ball, Cometas en el cielo, Guerra Mundial Z o Christopher Robin, la más reciente, filmada en 2018. 

La casa en la que ha vivido estos últimos años también tiene su historia. Está en Santa Monica, mide casi 1.000 metros cuadrados y cuenta con tres habitaciones, cuatro baños y un anexo para invitados. Conocida como Sten-Frenke House, fue construida en 1934 y está catalogada como Monumento Histórico Cultural de Los Ángeles nº 647 por ser una de las primeras obras diseñadas por el importante arquitecto Richard Neutra. 

Durante más de un siglo, Los Ángeles ha sido un lugar de inspiración y campo de pruebas para los arquitectos inconformistas que han tratado de utilizar materiales innovadores y poner boca arriba el diseño residencial tradicional. Entre casas de estilo colonial, villas "italianas" y mansiones "mediterráneas", en esa zona californiana encontramos una pequeña pero deliciosa cantidad de muestras arquitectónicas diseñadas por pioneros como Rudolph Schindler, Pierre Konig, John Lautner y Richard Neutra.

La geométrica residencia Wolff de Lautner, en voladizo sobre una empinada ladera sobre Sunset Strip, fue comprada recientemente por 5,9 millones de dólares por el cineasta noruego Joachim Rønning y la heredera emprendedora Amanda Hearst. La Lovell Health House de Neutra, en Los Feliz, ha estado disponible a un precio no revelado pero seguramente sorprendente.

Otra de las obras maestras más emblemáticas e internacionalmente reconocidas de Neutra, la Casa Sten-Frenke de Santa Mónica, inspirada en la Bauhaus, se ha puesto a la venta a un precio llamativo de 15 millones de dólares.

Terminada en 1934 y situada en la desembocadura del Cañón de Santa Mónica, está lo suficientemente cerca de la playa como para escuchar el rugido del oleaje sobre el rumor del incesante tráfico de la Pacific Coast Highway. La Casa Sten-Frenke fue encargada por la actriz ucraniana Anna Sten y su marido, Eugene Frenke.

Según cuenta la historia, la pareja con visión de futuro llegó a Los Ángeles a instancias del magnate de la industria cinematográfica Samuel Goldwyn, quien esperaba (pero no logró) convertir a la Sra. Sten en la "Garbo rusa".

Neutra era un arquitecto muy sensible a las necesidades y deseos de sus clientes y, debido a que Sten-Frenkes expresaron su amor por la naturaleza, la casa no solo está orientada a aprovechar las brisas marinas y las vistas del Océano Pacífico, sino también para estar en armonía y siempre en contacto con las áreas ajardinadas que rodean la residencia.

El interiorismo de la casa parece conservar piezas originales de diferentes décadas doradas de Hollywood. Espacios diáfanos como el salón, son una buena muestra de como interiores y exteriores dialogan constantemente, gracias a grandes ventanales de aluminio. 

En la curva que dibuja la arquitectura de la casa se ubica el comedor, donde las formas redondeadas son las protagonistas. 

En el piso de arriba de la curva, un estudio con terraza persigue la línea trazada por la fachada. 

En la cocina también se mantiene el mobiliario blanco original con las encimeras de acero inoxidable. Una distribución en paralelo salva el plano de planta rectangular de la sala. 

Los electrodomésticos también son de acero inoxidable, mientras que el office refuerza la imagen retro del proyecto. 

Otro de los estudios de la casa que el cineasta ha usado como despacho. Su decoración, sobria y cálida, resulta auténtica y acogedora. 

En el dormitorio principal volvemos a encontrar madera natural, en muebles y revestimientos de paredes. Y, como no, las omnipresentes vistas a los jardines y el mar. Todo un privilegio. 

Los baños se han modernizado pero nada de darles un aspecto de ostentosa "mansión de Hollywood". Aquí todo está proporcionado. 

La arquitectura de la casa es sorprendentemente moderna para haberse creado a principios de los años 30. Neutra fue todo un visionario. 

Los patios y jardines que rodean la piscina trazan caminos que propician paseos agradables por los exteriores de esta soleada residencia en Santa Mónica. 

Y la piscina, un elemento que no puede faltar en una casa moderna como esta y que está en total consonancia con el espíritu del proyecto.