La bella frontera de Portugal con Galicia, al norte de Braga, es el escenario donde se levanta la Casa Gerês, diseño del estudio Carvalho Araújo, con estudio en esta ciudad y São Paulo (Portugal). Previamente se levantaba otra casa que no soportó las condiciones orográficas de la finca y hubo que tirar ante la inminencia de ruina. La que ahora la sustituye supo en cambio aprovecharlas –un terreno escarpado por el que cruza un arroyo– y así surgió un idílico retiro en el que la arquitectura contemporánea supo aliarse con la naturaleza gracias a la virtud de la sencillez, la materialidad del hormigón y la madera y un estanque original convertido en una gran piscina natural.