Un moderno refugio de cristal y madera en un fiordo noruego
Snorre Stinessen ha creado un retiro moderno de cristal y madera de pino que se funde con el paisaje noruego.
Aquí hay veces en que lo único que se mueve son las nubes: un paraíso para los observadores de este fenómeno que, dispersos por el mundo, suelen citarse en paisajes ricos en cielos transitados y entretenidos. En este lugar de Noruega, de un azul cristalino, las nubes se reflejan en el agua, sombreada por las colinas de la costa, y también en los vastos cristales de la cabaña.
Al primer vistazo, el ojo asocia la forma irregular de la casa (compuesta de dos volúmenes ligeramente desplazados entre sí) con la inclinación de las colinas, con una voluntad de compenetrarse con la roca a través de sus líneas en diagonal y de reflejar a raudales el paisaje de agua y cielo en la fachada transparente y recta.
El cristal y la madera de pino (con la pátina que produce el sulfato de hierro añadido) son los materiales exteriores de esta cabaña, situada en un brazo del fiordo Ofoten, al norte de Noruega, y proyectada por Snorre Stinessen. La casa se abre y se cierra en distintas direcciones, logrando a la vez privacidad para los propietarios (que justamente eligieron este sitio buscando aislamiento) y una entrega frontal de las transparencias a la belleza hipnótica del paisaje.
La cabaña no se sostiene sobre pilotes, sino directamente sobre el terreno natural, confirmando la voluntad de compenetración antes mencionada. La continuidad con el exterior la expresan el pavimento de granito y las maderas de pino y de abedul, abundantes en la región.
Las nubes ahora son cada vez más negras. La luz cambia y los interiores cobran más color (ocres, castaños, grises) y más textura (las maderas, las alfombras, la piedra del suelo), y se vuelve más intenso el juego de líneas rectas y oblicuas mientras empieza a llover.