El estudio catalán Crü se ha encargado recuperar las dos piezas originales de un edificio de Barcelona que se habían fundido en una sola unidad en una intervención anterior. El resultado es una ejecución reflexionada y eficaz, sensible pero atrevida y tan accesible como impactante. Las viviendas, llamadas ‘La Sonia’ (de 70 metros cuadrados) y ‘La Selena’ (de 55 metros cuadrados) cuentan ambas con una terraza que abraza la fachada dentada del edificio. En ambas, el color se inserta para evidenciar el contraste entre la intervención posterior y lo existente, además de adquirir un rol como elemento ordenador del espacio.