Cargado de historia, así es Libeň, un barrio de Praga, el último en unirse a la ciudad antes de la fundación de Checoslovaquia en 1918 y el enclave donde se encuentra este ático recién reformado por Komon architekti. El arquitecto Martin Gaberle ha dado un lenguaje contemporáneo a una vivienda ubicada en la última planta de de una casa adosada de los años 30, donde en la década de 1990 se construyó un apartamento fragmentado en muchas habitaciones y poco funcional. Tras la intervención, el desordenado espacio de 84 metros habitables se ha convertido en un hogar moderno y funcional, de altos espacios en los que se juega al contraste del blanco y negro.