Matteo Monteduro (1970), Emiliano Roia (1971) y Andrea Quagliola (1972) fundaron el estudio de arquitectura MORQ en 2001. Los tres nacieron en Roma y se formaron en arquitectura en la Universidad La Sapienzia de la capital italiana. Esta ascendencia tiene mucho que ver con su trabajo como arquitectos, ya sea desde su sede en Roma o en Perth (Australia). Su relación con este último país pasa por la Universidad de Western Australia, donde Roia y Quagliola ejercen como profesores asociados.
Mientras que Monteduro dirige el estudio de Roma, Roia trabaja entre los dos contienentes y, además, enseña en España en colaboración con RCR Arquitectes. Por su parte, Quagliola dirige el estudio MORQ en Perth. Su trabajo, que abarca desde pequeños espacios residenciales y comerciales hasta grandes paisajes y planes urbanísticos, ha recibido numerosos premios y ha sido ampliamente publicado internacionalmente. Además de académicos comprometidos, colaboran en el diseño de exposiciones y dan conferencias por todo el mundo. Operan a escala internacional con proyectos en Europa, Oceanía y Asia.
Sus palabras sobre cómo entienden su trabajo son esclarecedoras y permiten comprender el tipo de arquitectura que practican: "Creamos espacios significativos dentro de edificios simples y reflexivos. Dialogamos con las condiciones existentes, ya sean naturales o construidas, y vemos las limitaciones como un punto de partida para nuestro diseño en lugar de impedimentos a nuestra creatividad. Nos gustan los espacios que son íntimos, pero abiertos, que interactúan con los tonos de la luz natural, cambian a lo largo del día y se activan por las cualidades sensoriales de los materiales".
En cada uno de sus proyectos se observa que MORQ obviamente ha pensado mucho en los anhelos y las necesidades de los clientes, imaginando cómo vivirían en un sitio en particular, todos los días, en relación con el sol, la brisa y los árboles. Como ellos confirman: "Siempre diseñamos para las personas. Al hacerlo, nuestros enfoques y valores no cambian: el sentido de compartir, la intimidad, la apertura interior y el silencio. Al diseñar espacios, nos preocupamos por sus relaciones, su secuenciación y, en particular, por cómo serán vividos. Buscamos un equilibrio en el modo en que se experimentan los espacios, y ofrecemos libertad para que el usuario encuentre formas alternativas de vivir en ellos".
Uno de los trabajos que más proyección internacional ha dado al estudio MORQ es Villa RA, ubicada en Calabria. En este proyecto, los autores expresan su interés por la investigación y personalización de materiales de origen local, a menudo nacidos de conversaciones con artesanos que encuentran a lo largo de su camino: "Crear una relación con ellos es importante y gratificante para nosotros tanto profesional como humanamente", aseguran. El trabajo artesanal siempre está presente en la arquitectura que nos emociona y cautiva, como la que ejerce MORQ.