Nadie conoce mejor a un hijo que una madre. En el caso de la interioristaAdela Cabré y su hijo, el arquitecto Albert Serrano, esta relación de confianza y unión va más allá de lo personal, ya que desde hace tres años también trabajan juntos. Ahora, se han embarcado en un nuevo proyecto, Adela Cabré & Son y su nuevo estudio, desde donde trabajan con respeto y pasión hacia la profesión para seguir diseñando espacios donde se viva bien.
En la puerta del anterior despacho de Adela Cabré se podía leer la frase "cuida tu casa, porque es la responsable de acoger algo tan importante como a ti y a los tuyos". Esta máxima es la que ha articulado el trabajo de la interiorista durante los 25 años su carrera profesional, y que ahora se traslada de la calle Diputación a la zona alta de Barcelona, para asociarse con su hijo bajo el sello Adela Cabré & Son, y seguir cultivando juntos la misma filosofía ampliada a servicios integrales de arquitectura de interiores y exteriores.
Adela Cabré y Albert Serrano celebran el inicio de la nueva etapa, en que lo más importante sigue siendo conferir a los proyectos un estilo depurado, coherente y esencial.
Foto: Adela Cabré & Son
El nuevo espacio es un proyecto conjunto, en una planta baja con jardín, junto a la plaza de la Bonanova en el distrito barcelonés de Sant Gervasi. Ambos han proyectado juntos un nuevo comienzo, respetando el valor arquitectónico de lo que había y adaptándolo al estilo relajado marca de la casa, donde poder trabajar de forma abierta y flexible, compartiendo su filosofía también a través de eventos y presentaciones.
El trabajo de Adela y Albert pone el énfasis en todo aquello que proporciona una buena vida al margen de la tendencia, y prima, ante todo, la comodidad, el equilibrio y la armonía.
Foto: Adela Cabré & Son
Para la ocasión inaugural, han invitado al artista italo-suizo Massimiliano Moro, que ha desarrollado una intervención efímera siguiendo su trabajo, que une luz, sombra, color y movimiento. De esta forma, Massimiliano ha creado para la ocasión una cosmogonía site specificde la unión entre Adela y Albert, que apoya el diseño del propio lugar, abriendo espacios de contemplación y buscando un equilibrio que evoca la naturaleza y la arquitectura. Para Adela, "el trabajo artístico de Massimiliano consigue aportar de forma equilibrada el valor de la luz que tanto me apasiona, que puede moldear y reflejar la personalidad de un espacio con gran versatilidad, y que lo hace con una elegancia y cuidado que es posible adaptarlo tanto a espacio privado como público".
El estudio refleja la sensibilidad del dúo en el uso de materiales, siempre nobles, y de tonos neutros en su mayoría, con un carácter genuino y resaltando sus atributos sensoriales.
Foto: Adela Cabré & Son
Después de tantos años de profesión, Adela Cabré ha conseguido depurar intuitivamente una metodología de trabajo propia para mantener la máxima calidad al diseñar proyectos de primer nivel y hacer a la vez que los procesos sean lo más sencillos y eficaces posible. "Siempre he querido diseñar desde la honestidad espacios donde se viva bien. Considero que el interior ideal es aquel capaz de combinar simultáneamente confort, calma y alegría de habitarlo. Y en estos tres últimos años de trabajo conjunto he visto cómo mi hijo, siendo arquitecto, ha disfrutado de la pequeña escala, ha descubierto la implicación e intimidad que conlleva el espacio residencial y ha respetado la entrega y responsabilidad que desde el inicio han caracterizado mi manera de entender la profesión, sin importar el tamaño o envergadura de los proyectos", explica Adela.
La obra lumínica de Massimiliano Moro representa la unión entre madre e hijo y apoya el diseño propio del lugar.
Foto: Adela Cabré & Son
Con este proyecto, Albert Serrano recoge el legado que la experiencia acumulada de su madre significa, y tras estos primeros tres años de trabajo y aprendizaje, asume la codirección del nuevo estudio con entusiasmo y compromiso. "El interiorismo me gusta mucho más de lo que pudiera haber pensado en un primer momento. Ahora lo entiendo literalmente como la arquitectura interior que ha de ir de la mano de la exterior. En realidad, son dos profesiones que cuando se desarrollan en paralelo funcionan mucho mejor y aportan algo más que la suma de ambas, lo que resulta en una mayor coherencia y consistencia de los proyectos".
La unión entre madre e hijo y sus trabajos también simboliza la unión de interiorismo y arquitectura, algo que debería ser la base de todo proyecto para conseguir un resultado más coherente.
Foto: Adela Cabré & Son
Una unión familiar que ha dado lugar a un proyecto profesional de estilo sobrio, calmo y atemporal, caracterizado por la elección de materiales naturales de primera calidad, la personalización al detalle de los proyectos y el cuidado máximo de la luz como elemento fundamental para aportar armonía a un espacio.